lunes, 26 de enero de 2009

Simplemente...fantástico





Odio las visitas inesperadas.
La tarde del sábado recibí una llamada...iba a tener visita.
Mi respuesta fue “No puedo creerlo ¿ en serio vais a venir?”.
Como loca fui al supermercado para llenar de refrescos, pan, algo de queso y embutidos el frigorífico. Apenas pude dormir la siesta, de hecho...no dormí.
Llegó la hora, eran aproximadamente las diez de la noche, cuando sonó el timbre, baje a abrir y allí estaban ellos, con una sonrisa de oreja a oreja y gritando "¡Primaaaaaaaaaaaaa¡".
Dios mío, estábamos tan emocionados...iban a pasar el fin de semana conmigo, sin mujeres sin hijos, solo nosotros.
Yo estaba lista para salir, así que tras dejar alguna mochila en casa, nos fuimos a cenar.
Hablamos, reímos , nos emocionamos...
Pero, llegó la hora de la diversión, nos fuimos al centro, recorrimos varios “garitos”, nos hartamos de bailar y de hacer el payaso, parecía que teníamos de nuevo 12 años.
Con los pies reventados y con el cuerpo dolorido(saltamos,gritamos, hicimos el burro, el caballito...)
Parecíamos tres locos por la calle. Sé que llegamos tarde a casa, no recuerdo que hora era, mientras ellos dormían, yo, encendí mi ordenador, vi el correo, entre a algunos foros, etc, etc.
Me levante temprano, el olor del café no los despertaba así que...use la técnica del agua fría, como en los viejos tiempos, consistía en derramar un vaso de agua encima de sus cabezas(esta vez, use el agua caliente, jajaja) el salto fue tremendo¡¡¡¡¡¡.
Así comenzamos la mañana, mientras desayunábamos, recordábamos y añorábamos el pasado, cuando nos íbamos a un “escampao” con nuestras ondas y nuestros tirachinas de fabricación propia y practicábamos el tiro en cualquier lata vacía, hasta que claro, luego las dianas pasábamos a ser nosotros, yo era más burra y me sentía mas chico que ellos, siempre competiamos, pulsos, carreras...
Los llevé de nuevo a la capital, estuvimos tapeando, tomando cervecitas (el día no acompañaba mucho, estaba nublado, pero eso no nos importaba).
Una parada para llamar a sus mujeres y decirles que todo estaba bien, que después del café saldrían para casa.
La última vez que quedamos toda la familia fue esta navidad, hacia muchísimo que no nos veíamos, solo lo hacíamos en bodas, bautizos, ya sabéis, este tipo de eventos familiares.
Tenerlos aquí, a los dos, a los primos que desde pequeña mas he querido, con los que más me he divertido...fue fantástico.
Volvimos a casa, y mientras uno de ellos preparaba el café, encendí mi ordenador y me puse a enseñarle el fantástico mundo de internet, donde todo es posible, le dije como usar algunas páginas, como encontrar su música preferida, sus pelis...
Entramos a algunos sitios que son exclusivos y quedaron alucinados, por increíble que parezca, ni siquiera tienen mesenger.
Recordábamos mientras navegábamos, cuando jugábamos a los médicos y ellos me decían “Prima, tu no puedes jugar que somos familia” y yo le contestaba “ ¿y la familia no puede ponerse mala para ir al médico?” Evidentemente yo, era más pequeña que ellos y aun no sabía nada sobre en qué consistía el famoso “Juego de los médicos”.
Aun me duele la mandíbula de tanto reír, hemos quedado para alquilar de nuevo una casa, como la que alquilamos en Diciembre, pero esta vez, en el pueblo de mis abuelos. Estaremos todos de nuevo, primos, primas, esposas, esposos, niños, sobrinos...Todos.
Ha sido increíblemente emotivo.

Te quiero José, Te quiero Fernando No cambiéis Nunca.

4 comentarios:

Malicia en el espejo dijo...

Ciertos recuerdos de la infancia, y ciertas personas, no se olvidan nunca.. Por supuesto, resulta divertido traer a nuestra memoria algunos momentos y algunos juegos, y resulta aún más divertido volver a sentirse como una adolescente (cuando hace ya tiempo que se dejó de serlo) y reír junto a esas personas con las que cometimos tantas pequeñas locuras..

:-)

Un saludo!

brujita dijo...

¡Qué maravilla reencontrarte y sentir que casi nada ha cambiado!...


un besito volado

Manu dijo...

JOSE, FERNANDO, YO TB OS QUIERO :)

Volemos... dijo...

Culo veo....culo quiero, manu? Vaya, sales del armario...ummmm, interesante¡¡¡:p